En su precisa enumeración de las virtudes de este blog, y en particular de su chispeante humor, JF omite, con intención, a la niña de sus ojos: la poesía. Para demostrar que tampoco ella nos es ajena hemos escrito un soneto –de discretos méritos y acentuaciones algo dudosas– conmemorativo de los magnos tiempos de los que nos toca ser partícipes.
Soneto de invitación
Se invita a mirarlo desde afuera
mientras dentro, PRO-hombres se pasean
buscando con su galas que los vean
ser parte de cultura tan señera.
No se suspende, aunque no lo crean
por lluvia ni tormenta verdadera.
No será ésta la ocasión primera
En que tristes figurones menean
sus menaces figuras al resguardo
y el pueblo cual caballo del establo
recibe las noticas con retardo:
el costo del arreglo del retablo
se acerca al de un cuadro de Leonardo
para gloria de Maese Pedro (Pablo).
Diego Fischerman señala que los méritos de su soneto son discretos y sus acentos, dudosos.
ResponderEliminarQuiero entonces sumar a sus esfuerzos, los míos.
"Soneto para el humor perdido"
Qué sensible te has puesto, mi buen Diego,
Por la mención casual que a tu humor hago.
Sin embargo, te juro, no hubo menoscabo,
Sólo comprobación y de eso no reniego,
Y me enrostras a Macri, tu desvelo,
En un soneto que viví como un mal trago.
No persita tu saña, te lo ruego,
No hagas de la fecha un día aciago.
Confiesa el chiste malo, mi querido
A las corcheas vuelve y reflexiona.
Depón, te lo suplico, tu orgullo malherido,
Los ripios hasta el tiempo los perdona.
Pero el humor que siempre has inflingido
A tus lectores ni Cristina lo mejora.
Cambio de género
ResponderEliminarOh, hados que desde el vinoso Ponto acecháis. ¿Qué he hecho para merecer esto? ¿Acaso mis chistes no son buenos?
Y además, para criticar mi humor sabio e irresistible, que por lo menos sea con endecasílabos bien contados.
ResponderEliminarVa una modesta reflexión en rima, en tono con este post.
ResponderEliminarBendecido por el bueno de Mauricio,
En fiesta tan prolija y meritoria
Renació en el Centenario, el edificio
Y ahora hay bronce y hay plaqueta, más no gloria.
A la espera de oportuno beneficio
Posa Mauri, más no tolera corales.
Tras haberse sometido a hondo suplicio
Especula con triunfos electorales.
No pretendo ocultar el artificio:
Rimo como el Profesor Jirafales.
E.