Que unos blogs –o quienes los hacen– se dediquen a comentar lo que otros blog y otros blogueros publican podría ser un juego endogámico. Un club de amigos que se reparten chistes privados cuyo sentido es incomprensible para la mayor parte de los que leen (y son muchos, lo que no deja de sorprenderme). Más allá de que ese chiste privado pueda aparecer en los comentarios, de vez en cuando, hay algo que no me parece menor. La música, en la Argentina, casi no ha despertado la reflexión de los intelectuales –como lo han hecho el cine, el teatro, la literatura o las artes plásticas– y la ensayística local sobre la materia es escasísima, incluso en temas locales de peso. No hay, hasta ahora, libros escritos sobre el estilo de la orquesta de Troilo, por ejemplo, o sobre las escuelas en el bandoneón, o sobre los debates existentes –o no existentes, lo que también es un dato–, acerca de la música
clásica argentina.
Martín Liut,
Pablo Gianera y
Gustavo Fernández Walker están trabajando en ensayos sobre música y, tal vez no casualmente, tienen blogs donde
ensayan sus ensayos. Donde ponen en circulación sus ideas. Me parece trascendente, en todo caso –además de grato– que entre esos tres blogs y éste se haya generado una corriente de lectores y que, en eso que podría no haber sido más que un club cerrado, se esté hablando –se esté pensando– sobre música.
Aun a riesgo de que se me (y nos) acuse de endogamia, confieso que me alegra que formularas algo que venía pensando hacía tiempo.
ResponderEliminarEsto lo puse en otros blogs que hablaban del tema. En la blogosfera se tiende a producir rizomas de identificación, ya que los usuarios tienden a moverse en círculos de afinidad.
ResponderEliminarExisten miles de blogs de descarga de odio al gobierno oficialista de los Kirchner que sólo sirven como descarga emocional vicaria.
Existen miles de blogs autorreferenciales que muestran autoalabanzas y caricias al ego tanto del autor como de sus comentaristas.
Existen miles de blogs de exhibición de un erotismo voyeurista que sólo sirven para entibiar las soledades crónicas.
Pero existe muy poco diálogo, confrontación y dialéctica en la blogosfera.
Ergo, no se aprende tanto, hay mucho verso al pedo y estoy tentado a decir neurosis cibernética.
Es como la televisión, un medio que condiciona mucho y que es mucho más fácil y rentable usar mal que bien, en términos culturales claro.
Entonces -hablar de cultura en la blogosfera, dentro de poco será tan imcoherente como la telvisión de aire.
Salvo honrosísimas expcepciones como el presente blog, que me alegra sobremanera haber encontrado.